AS Mónaco no pudo quebrar el cero frente al Tottenham

Con el portero italiano de los Spurs como figura, los monegascos dominaron gran parte del encuentro, pero siguen sin ganar en esta Champions.

Vicario, portero de los Spurs, la gran figura con 8 tapadas.

El Estadio Luis II fue testigo de un duelo vibrante pero sin goles entre el Monaco y Tottenham, correspondiente a la jornada 3 de la fase de liga de la Champions League. A pesar del marcador final, el empate 0-0 dejó sensaciones muy distintas. El conjunto local fue superior, generó más ocasiones y mereció el triunfo, pero se topó con una muralla llamada Guglielmo Vicario, quien con ocho atajadas fue el héroe indiscutible de los ingleses. Con este resultado, el Mónaco sigue sin ganar en el torneo y permanece fuera del top 24, mientras que el Tottenham sumó su segundo empate y se mantiene dentro de la zona de repechaje.

El encuentro comenzó con llegadas en ambas áreas desde los primeros minutos. Con un Mónaco con más ambición ofensiva, con Ansu Fati y Akliouche generando peligro. Balogun tuvo la primera gran oportunidad en un mano a mano al minuto 28, pero Vicario reaccionó con una mano salvadora. Los ingleses intentaron responder mediante jugadas a balón parado, con Van de Ven y Danso amenazando en el juego aéreo, aunque sin fortuna. El primer tiempo se cerró con dominio local, pero sin efectividad frente al arco.

Ya en la segunda mitad, el Mónaco mantuvo la presión alta. Akliouche y Minamino fueron los más activos por los costados, mientras Vicario seguía agrandando su figura. El Tottenham intentó equilibrar el juego con los ingresos de Xavi Simons, Kolo Muani y Johnson, pero no logró generar peligro real. La afición local estalló cuando Minamino falló una ocasión clarísima al 78’, enviando el balón por encima del travesaño cuando el gol parecía inevitable.

Los últimos minutos reflejaron la frustración del anfitrión y la resistencia de la visita. El arquero italiano fue clave para mantener el empate, y aunque los dirigidos por Thomas Frank se conformaron con el punto, el sabor fue amargo para los locales, que lo intentaron todo sin premio. El 0-0 engañoso dejó en evidencia la falta de eficacia del Mónaco y la solidez del guardameta visitante, que con una actuación monumental mantuvo a su equipo dentro de la zona de repechaje en estos tres primeros partidos.