El Atlético de Madrid saltaba al campo con una 5-3-2 jugando con Nahuel Molina de central y como carrileros por la derecha Giuliano Simeone y por la izquierda Javi Galán, en el centro del campo estarían Gallagher, De Paul y Barrios y arriba para el gol Julián y Antoine Griezmann. El partido empezaría con un PSG abusivo frente a una blandita defensa del Atlético, demostrado quedaría con el grave error defensivo de Clement Lenglet en el minuto 14 que perdería un balón dentro del área ante Dembélé para que el extremo francés le dejará a placer el gol a su compatriota Zaire Emery. Tras el gol el Atlético despertaría rápido y en el minuto 18 tras unos buenos pases rápidos dentro del área de Giuliano, Julián y Nahuel Molina, que este último sería el que colocaría el empate a uno en el marcador. Tras esto el resto del primer tiempo sería dominios momentáneos de cada equipo aunque se le veía al PSG con las ideas más claras, explotar las bandas con Dembélé y Barcola ya que por dentro era imposible avanzar con el buen blindaje que tendría el Atlético con Barrios y Gallagher. Tras el descanso tendríamos un partido algo más tranquilo sin mucho peligro por parte del PSG aunque con un Dembélé buscando la llave del gol sin encontrarla, en el 60 entraría Reinildo que en cuanto a opiniones es para muchos el mejor del Atlético jugando solo media hora. En el 68 entraría un ángel al campo y es que con el PSG picando piedra continuamente pero sin encontrar el gol el árbitro añadiría 3 de descuento y en el minuto 93 justo en los últimos 15 segundos ese ángel llamado Ángel Correa marcaría el gol de la victoria tras un grandioso pase de Antoine Griezmann. Tras esto, el Atlético después de sufrir lo insufrible se llevaría el partido tirando de épica.
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