El Real Murcia deja buenas sensaciones en su último partido de pretemporada
- Francisco Martínez

- 27 ago
- 3 Min. de lectura

El fútbol veraniego dejó una tarde intensa en el complejo Pinatar Arena, donde el Real Murcia se midió a su filial, el Real Murcia Imperial, en un duelo de preparación con más emociones de las previstas. Bajo un calor sofocante, que obligó a realizar dos pausas de hidratación, los de la primera plantilla se impusieron finalmente por 2-1, pero el filial dejó una imagen competitiva y momentos de gran mérito.
El encuentro comenzó con un guion esperado: el Real Murcia dominando la posesión, llevando la iniciativa y presionando alto, mientras el Imperial trataba de aguantar, salir rápido a la contra y aprovechar algún despiste. La primera gran ocasión llegó en el minuto 20, cuando Seyram estrelló un remate en el poste tras una brillante acción individual de Pedro León, uno de los más activos en la medular. Apenas un minuto después respondió el filial, con un disparo lejano de Luiz Enrique que se marchó rozando el larguero, demostrando que los chavales también querían dejar su sello.
La intensidad no bajaba y en el 22’ apareció Juan Carlos Real, que se plantó mano a mano frente al portero rival. Su vaselina se quedó corta y la defensa del Imperial salvó bajo palos, evitando lo que parecía el 1-0. A pesar del control grana, el filial demostraba descaro en cada acercamiento. Tras la primera pausa de hidratación, el guion se mantuvo: dominio del Murcia y resistencia del Imperial.
Cuando todo parecía encaminado al descanso sin goles, una jugada de tiralíneas entre Pedro León y Juan Carlos Real abrió la defensa. El “pase de la muerte” lo aprovechó Aitor Sarabia, que empujó a la red para abrir el marcador en el minuto 45. Un tanto psicológico que reflejaba la superioridad de los mayores, aunque el filial todavía tuvo que sufrir un remate final de Juan Carlos Real que rozó el palo. Con ese 1-0 se llegó al intermedio.
La segunda parte comenzó con el Real Murcia insistiendo en ataque. La circulación de balón era más rápida y el Imperial sufría para sacarlo jugado. No obstante, el filial seguía defendiendo con orden y buscando sorprender al espacio. La segunda pausa de hidratación volvió a dar un respiro, pero el cansancio empezaba a notarse.
En el minuto 78 llegó el 2-0. Pedro Benito, incisivo desde su entrada, aprovechó un pase filtrado, regateó al guardameta y definió a placer para ampliar distancias. Todo parecía sentenciado, pero el Imperial nunca bajó los brazos. Apenas dos minutos después, en el 80, Meca culminó un buen contragolpe con un disparo cruzado que recortó diferencias, llevando el 2-1 al marcador y dando emoción al tramo final.
El filial incluso pudo empatar, pero apareció la figura de Saba, su portero, con una triple intervención milagrosa que evitó el tercero del Real Murcia. Sus reflejos mantuvieron al Imperial con vida hasta el pitido final, aunque el marcador ya no se movería.
Con el 2-1 definitivo, el Real Murcia cierra su último amistoso de pretemporada con buenas sensaciones, sobre todo en ataque, aunque con la tarea pendiente de mejorar la puntería. El Imperial, por su parte, salió reforzado: compitió de tú a tú en muchos tramos, dejó destellos de talento individual y mostró la proyección de varios de sus jóvenes.
Ahora sí, el equipo grana ya mira al inicio liguero: el próximo 1 de septiembre debutará en Marbella en busca de arrancar con fuerza la temporada oficial.




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